La situación en la industria siderúrgica argentina se agrava. Acindar, una de las principales empresas del sector, ha suspendido la producción de acero en su planta de Villa Constitución, provincia de Santa Fe, hasta el lunes 4 de agosto. Esta medida ha afectado a cerca de 600 trabajadores, quienes percibirán el 75% de su salario durante el período de suspensión, que comenzó el sábado 26 de julio.
Christian Miguez, integrante de la comisión interna de Acindar Villa Constitución y referente de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), describió la situación como dramática. En declaraciones a la 750, Miguez explicó que la empresa ha paralizado el 85% de su planta y suspendido a 500 trabajadores debido a la caída de la demanda interna y el aumento de las importaciones, especialmente desde China. La paralización de la obra pública también ha contribuido al desplome de la demanda de materiales.
"Vamos a seguir cayendo", advirtió Miguez, expresando su preocupación por el futuro del sector. Según sus declaraciones, la economía se encuentra cada vez más “retraída” y la incertidumbre es la principal constante. La situación es tan crítica que Miguez teme que el segundo semestre sea aún peor que el primero, perforando el piso que creían haber alcanzado.
La empresa ya había paralizado el tren de laminado número 2 en mayo, lo que afectó a 76 trabajadores que fueron suspendidos. Ahora, la paralización del tren número 1 agrava aún más la situación. Miguez enfatizó que están haciendo todo lo posible para soportar y resistir, protegiendo los puestos de trabajo, pero la situación se vuelve cada vez más compleja.
Impacto de las políticas económicas actuales
La crisis en Acindar se produce en un contexto de crecientes dificultades para la industria metalúrgica en general. Las políticas económicas implementadas en los últimos meses han impactado negativamente en la demanda interna y han facilitado el ingreso de importaciones, poniendo en riesgo la producción nacional y el empleo. La situación de Acindar es un reflejo de los desafíos que enfrenta el sector industrial argentino.