El próximo encuentro entre Botafogo y Corinthians ha generado controversia antes de que siquiera el balón comience a rodar. La designación del árbitro Rodrigo José Pereira de Lima, conocido por sus decisiones polémicas, ha levantado cejas y encendido el debate entre los aficionados y analistas deportivos.
El Corinthians, tras empatar 0-0 con Cruzeiro en la última jornada del Brasileirão Betano en su estadio, la Neo Química Arena, se prepara para viajar a Río de Janeiro y enfrentarse a Botafogo en el estadio Nilton Santos. Con 20 puntos en la tabla, el Timão sabe que una victoria contra el equipo carioca es crucial para mejorar su posición y ganar impulso antes del clásico en la Copa Betano do Brasil.
Un árbitro con historial complicado
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) designó a Rodrigo José Pereira de Lima, árbitro FIFA y de la Federación Pernambucana, para dirigir el partido. Sin embargo, su historial está marcado por varias controversias que preocupan a los seguidores del Corinthians.
En la 34ª jornada de 2023, durante un partido entre Corinthians y Grêmio, Rodrigo José Pereira de Lima no sancionó un penal a favor del equipo paulista. A pesar de la revisión del VAR, la decisión fue muy criticada por expertos en arbitraje, quienes consideraron que la falta existió.
El incidente involucró a Matheus Bidu, quien, tras recibir un pase de Fagner entre las líneas defensivas del Grêmio, quedó mano a mano con el portero. Sin embargo, antes de poder rematar, fue desequilibrado por un defensor que lo derribó desde atrás, impidiendo que continuara la jugada.
¿Un presagio negativo?
Este historial genera incertidumbre sobre cómo Pereira de Lima manejará el crucial partido entre Botafogo y Corinthians. Los aficionados del Timão esperan que el árbitro actúe con imparcialidad y no influya en el resultado del encuentro. La presión está sobre él, y cada una de sus decisiones será examinada con lupa.