La escalada de tensiones en Medio Oriente suma un nuevo capítulo preocupante: el gobierno de Irán lanzó una dura advertencia contra el argentino Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). La amenaza provino de Ali Larijani, asesor del líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, quien advirtió en redes sociales: “Una vez que termine la guerra, nos ocuparemos de él”. La declaración se interpreta como una amenaza directa contra Grossi, responsable del monitoreo internacional sobre el uso de energía nuclear.
El contexto: Uranio enriquecido y acusaciones cruzadas
La amenaza se produce tras la publicación de un informe del OIEA que detalla los niveles de uranio enriquecido que Irán mantiene en sus instalaciones nucleares. El informe indica que Teherán posee suficiente material para producir armas nucleares si eleva el nivel de procesamiento del uranio acumulado. Este informe desató la furia del régimen iraní, que acusa a Grossi y al OIEA de influir en la posición de la comunidad internacional y de alimentar el apoyo a Israel.
Grossi responde a las acusaciones
En una entrevista con CNN, Rafael Grossi respondió a las acusaciones, defendiendo la independencia y objetividad del OIEA. La situación genera gran preocupación a nivel internacional, dado el papel crucial del OIEA en la verificación del cumplimiento de los acuerdos nucleares y la prevención de la proliferación de armas atómicas.
- La amenaza se produce en un contexto de alta tensión regional.
- El informe del OIEA sobre el uranio enriquecido iraní generó la reacción.
- Grossi defiende la independencia del OIEA.
El incidente pone de manifiesto la fragilidad del equilibrio en Medio Oriente y la importancia del rol del OIEA en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.