Después de casi tres décadas de espera, Racing Club ha logrado un hito impresionante al avanzar a las semifinales de la Copa Libertadores. La victoria 1-0 sobre Vélez Sarsfield en Avellaneda, con un global de 2-0, desató la euforia entre los hinchas y consolidó el proyecto liderado por el entrenador Gustavo Costas.
Superioridad Táctica y Resiliencia Académica
El partido de vuelta en el Estadio Presidente Juan Domingo Perón fue un claro reflejo de la superioridad táctica de Racing. Desde el pitido inicial, el equipo impuso una presión constante sobre Vélez, generando numerosas oportunidades de gol. Sin embargo, la falta de precisión y la destacada actuación del arquero Tomás Marchiori impidieron que la Academia abriera el marcador en la primera mitad.
La insistencia de Racing se tradujo en múltiples ocasiones, incluyendo un remate al palo de Solari, un mano a mano fallido del mismo jugador, y otros intentos desviados de Almendra y Conechny. En contraste, Vélez luchó por generar peligro en el área defendida por Facundo Cambeses.
El Cambio de Rumbo de Costas: Clave del Éxito
El secreto detrás del éxito de Racing radica en la profunda transformación implementada por Gustavo Costas. Tras un período de dudas y críticas, el entrenador demostró carácter y tomó decisiones audaces que revitalizaron al equipo. La victoria sobre Vélez, un rival de gran nivel, tanto en Liniers como en Avellaneda, es una prueba fehaciente de la capacidad de Racing para competir a nivel internacional.
“Hicimos uno de los mejores partidos desde que llegamos. Cada pelota que se perdía, se recuperaba. Estuvimos juntos… Con estos jugadores voy a la guerra”, declaró Costas, resaltando la unidad y el compromiso del equipo.
La Fecha FIFA: Un Punto de Inflexión
El parate por la fecha FIFA resultó crucial para que Costas analizara y ajustara su estrategia. Las dudas en el arco y el esquema de juego fueron objeto de revisión, lo que permitió al equipo recuperar la confianza y mejorar su rendimiento.
El camino hacia la semifinal no ha sido fácil, pero la resiliencia y el espíritu de lucha de Racing lo han llevado a soñar con la Copa Libertadores. Ahora, la Academia se prepara para enfrentar nuevos desafíos y buscar la gloria continental.